Si tienes un problema familiar, somos abogados de familia en Sevilla
El concepto abogado de familia consta de dos palabras muy importantes. La primera se trata de la «familia», cuya definición engloba a conjunto o grupo de personas vinculadas por parentesco, matrimonio o adopción. La segunda se trata de «abogado», que es el profesional encargado de adoptar las estrategias para solventar los problemas familiares que surgen, ya sea en procedimientos judiciales como extrajudiciales.
¿Cuál es el principal objetivo que deben llevar a cabo los abogados de familia?
El objetivo primordial de este tipo de abogado especializado en esta materia específica de Derecho de Familia es la de asesorar en todas las cuestiones que susciten dentro del núcleo familiar. Hemos de hacer hincapié, que este abogado puede representar en caso de separación o divorcio a una o a varias personas de este núcleo familiar.
Sin embargo, además de lo mencionado anteriormente, el abogado de familia también tiene competencias en disputas entre hermanos por el control de un negocio, el reparto de una herencia, en procesos de tutela e incapacitaciones. Por lo tanto, aunque esté especializado en esta rama tan específica del derecho, verdaderamente debe manejar casi todos los aspectos fundamentales del derecho civil.
Podemos concluir, que este tipo de abogado es la persona idónea para realizar la defensa de los derechos e intereses de los miembros de una familia que así se requiera.
Tipos de procedimientos de Familia
- Divorcio, separación, medidas paternofiliales. Redacción de convenios reguladores.
- Modificación de medidas.
- Testamentos, herencias. Junta de herederos, partición y aceptación herencia.
- Ejecución de impago de alimentos, ejecución por incumplimiento de sentencia en cuanto a régimen de visitas.
- Incapacitaciones.
- Liquidación del régimen económico matrimonial. Sociedad de gananciales.
- Adopción y acogimiento.
- Menores.
- Autorizaciones judiciales para vender vivienda a nombre de menor, para residir en otro domicilio, etc. Ley Jurisdicción Voluntaria.
En último lugar, y no menos importante que lo dicho anteriormente, además de poseer los conocimientos mencionados un buen abogado de familia ha de tener empatía, ha de ser atento ante las necesidades de la familia que le consulte, ha de ser cercano, flexible, razonable, garante de la paz del núcleo familiar. En definitiva, debe tener dotes de comunicación y mucho conocimiento sobre la psicología.